UNRC: la deuda para funcionamiento supera los $ 250 millones y tiene a la inflación como principal enemigo

ayer se concretó un envío de fondos para funcionamiento que equivale a poco más de lo que corresponde para medio mes de febrero, por lo que a la fecha el gobierno nacional adeuda unos tres meses de tales partidas.

“Nos adeudan una parte de febrero, todo marzo, abril y lo que va de mayo. Y eso nos complica en un contexto de inflación porque el funcionamiento de la Universidad sin esos fondos siempre se ve limitado a que tengamos que estar jerarquizando las urgencias y ver cómo acomodamos la inversión y el gasto público”, señaló Gastón Chiesa, secretario económico de la casa de altos estudios.

El funcionario universitario explicó también que ayer fue presentada en la reunión del Consejo Superior la distribución presupuestaria para el segundo semestre del año, al tiempo que precisó cómo se diferencia la administración respecto de lo económico y lo financiero.

“Lo económico trabaja sobre una cuestión de crédito presupuestario, entonces dotamos a las áreas de capacidad de gastos. Y la parte financiera va a depender de la celeridad con la que el gobierno nacional debe enviar a partir de la aprobación del presupuesto que previamente hicieran en la Legislatura nacional. Nosotros tenemos una norma que la aprobó la Legislatura nacional y luego el Gobierno va enviando esos fondos a las distintas áreas, en este caso, a la Universidad Nacional”, sostuvo Chiesa.

Para agregar: “Esos fondos se desdoblan en dos grandes partidas. Por un lado, lo que es la partida de haberes y por el otro, la partida de gastos de funcionamiento. Y hay que decir que respecto a la partida de haberes, siempre han llegado al día. Es decir, la Universidad Nacional, en este contexto económico complicado, siempre el último día hábil del mes ha pagado sus sueldos. Sin embargo, en lo que son los fondos de funcionamiento que es con lo que llevamos adelante el día a día, la Universidad tiene un retraso mayor a lo normal”.

El gobierno nacional debe enviar alrededor de 85 millones de pesos por mes para funcionamiento y la dilación de tres meses los obliga a efectuar un manejo quirúrgico de los fondos.

-¿Cuáles son los ámbitos que más se resienten por esta demora?, le preguntó Puntal a Chiesa.

-Te lo respondo a la inversa. Cada vez tenemos gastos más altos en energía, de funcionamientos básicos como servicios, limpieza o el comedor universitario. Entonces esas son partidas que generalmente tienen altos gastos de funcionamiento y donde los precios de oferta varían rápidamente con la inflación, como por ejemplo, en el rubro de alimentos. Y uno de los rubros que se ve bastante afectado y que es un gasto grande para nosotros tiene que ver con todo lo referente a la obra pública, todo lo que es construcción. En este momento, estamos reparando residencias universitarias y necesitamos congelar precios y no tenemos dinero para poder hacerlo. Por lo que comprar, en este contexto, ese tipo de bienes nos resulta bastante complicado cuando tenemos que dar cuidado a todas las áreas del presupuesto de la Universidad.

Chiesa dijo que con la presentación ante el Consejo Superior se cierra la instancia interna del planteo a nivel institucional y que ahora aguardan la posibilidad de ser recibido por el secretario de Políticas Universitarias de la Nación para, además, poder compartir con él una agenda de trabajo para llevar adelante con el Rectorado de manera conjunta en la Universidad local.

Chiesa consideró que se espera que a partir de ese encuentro puedan contar con un panorama más claro en torno a la previsión del envío de dichos fondos.