Segunda ola: advierten que están llenas las terapias de las clínicas

Por el aumento de contagios de Covid-19 en los últimos días, advierten que están llenas las terapias intensivas de las clínicas y sanatorios de la ciudad.

El incremento en la ocupación de las camas UTIgenera preocupación en los directivos de las instituciones médicas locales, sobre todo porque en esta etapa de la pandemia los que más se enferman son los jóvenes, que tienen más tiempo de internación que los adultos.

Según se informó, en general los jóvenes necesitan camas con respirador porque llegan tarde a la internación y deben ser asistidos con urgencia.

“Está muy complicado el tema de las camas de terapia. Por ejemplo, de 17 pacientes internados, tenemos 12 en terapia y 5 en el piso”, dijo ayer en diálogo con Puntal el director de la Clínica del Sud, Juan José Bossio.

2.400: Es la cantidad de vacunas destinadas a Río Cuarto que serán aplicadas hoy y mañana en el Polideportivo 2.

Yañadió:“Estamos teniendo dificultad en la terapia intensiva porque tenemos pacientes internados que son jóvenes que llevan mucho tiempo ocupando las camas. Entre 15 y 20 días”.

“Tuvimos que armar dos habitaciones para cuidados especiales y agrandamos la guardia para tener más lugares porque se está usando mucho el respirador”, afirmó.

Yacotó:“Hoy hay más internados jóvenes, que, a diferencia de los adultos mayores, están viniendo tarde, entre el noveno y décimo día, y requieren respirador porque los pulmones están destruidos”.

“Las camas de terapia siempre están llenas y los jóvenes ocupan más tiempo la terapia. Está muy caliente el tema de la cama de terapia”, manifestó.

Tiempo atrás, las clínicas locales se encontraban al borde del colapso porque tenían muchos casos de patologías crónicas pero al mismo tiempo crecían los casos con patología Covid-19.

Cabe acotar que los sanatorios de la ciudad reciben también derivaciones de pacientes que vienen de la región.

Ahora, con la puesta en marcha de la carpa prehospitalaria al lado del Nuevo Hospital se busca evitar que el sistema de salud local colapse, dado que los pacientes que no estén comprometidos con el coronavirus volverán a sus domicilios particulares.