Aún no se sabe de qué murieron el hombre y las mascotas que comieron milanesas

Aún no se sabe de qué murieron el hombre y las mascotas que comieron milanesas

A pesar de haber pasado más de un mes, aún no está determinada la causa de la extraña muerte del hombre de 46 años.

- Familia intoxicada tras comer milanesas en mal estado: murió el hombre y sus cuatro mascotas

El Cuerpo Médico Forense hizo la autopsia de Marzola para saber qué provocó su muerte, especialmente ante la insistente sospecha de la familia que fue luego de comer milanesas en mal estado, informan los colegas de Diario Uno.

Los especialistas no lograron determinar si hubo algún factor externo que causara la muerte de Marzola e indicaron que necesitaban estudios más minuciosos.

Para eso, buscaron un laboratorio con una mayor tecnología, lo que les llevó unas semanas conseguir uno donde realizaran los estudios necesarios.

Estos nuevos análisis demoran por lo que le anticiparon a la familia de la víctima que deberán tener paciencia hasta que se puedan conocer detalles de las pericias.

El hecho

El 20 de enero pasado, Marcelo Marzola, su esposa y sus hijos prepararon el almuerzo en su casa de Maipú, provincia de Mendoza. 

Comieron milanesas que hicieron ellos en su casa con una ensalada de arroz. Pero en el primer bocado sintieron un gusto feo.

Lo primero que hicieron fue sacarle la milanesa a la hija más chica, a quien se la habían cortado en pedacitos en su plato. Su esposa también desistió de comer, mientras que Marcelo y su hijo mayor continuaron con el almuerzo.

Luego, las sobras se las dieron a sus perros y gatos. Al día siguiente descubrieron que todas las mascotas estaban muertas.

Ese mismo día Marcelo y su hijo mayor estaban muy descompuestos y tenían entumecimiento en su cuerpo, y ante lo que había pasado con los animales, fueron inmediatamente al Hospital Paroissien, donde quedaron en la guardia con suero.

El hijo mejoró y fue dado de alta a las pocas horas, mientras que el cuadro de Marcelo era cada vez peor. No se podía mover, ni tampoco podía hablar.

A pesar de esto, al día siguiente le dieron el alta sin ningún diagnóstico. El hombre no podía hablar y tenían que movilizarlo en silla de ruedas. Regresó a su casa sin ningún tratamiento médico.

Durante los días siguientes se fue recuperando muy lentamente, pero la debilidad que tenía nunca la había sentido. El lunes 25 tenía que ir a trabajar, pero no tenía fuerzas, y decidió ir al Hospital Central.

Quedó internado y le hicieron estudios, pero antes de poder aplicar un tratamiento y saber con exactitud que tenía, Marcelo Marzola murió.

Los médicos solo pudieron estimar que había sufrido una gastroenteritis severa con un origen infeccioso.