“Bienvenidos al infierno”: el saludo que el jefe de las fuerzas armadas ucranianas les había anticipado a las tropas rusas

“Bienvenidos al infierno”: el saludo que el jefe de las fuerzas armadas ucranianas les había anticipado a las tropas rusas

Las fuerzas armadas ucranianas están preparadas para recibir a cualquier invasor con armas modernas, había respondido semanas atrás el general Valery Zaluzhny, jefe de las fuerzas armadas de su país, cuando le preguntaron si los oficiales y soldados a su mando estaban preparados para repeler una invasión.

Por entonces, la invasión rusa se escribía en potencial.

Los recibiremos, dijo Zaluzhny, “no con flores, sino con stingers y javelins; bienvenidos al infierno”.

Los stingers son misiles tierra-aire que pueden ser disparados por tropas de infantería y, en manos de los mujaidines, fueron un verdadero tormento para las tropas soviéticas que en 1979 invadieron Afganistán. Los javelins son misiles antitanque. Ambas armas fueron desarrolladas respectivamente por Raytheon y Lockheed Martin, dos contratistas militares norteamericanos.

Zaluznhy, que aún no cumplió los 49 años, ascendió a la jefatura de las fuerzas armadas ucranianas en julio pasado, después de una fuerte restructuración de mandos dispuesta por el presidente Volodimir Zelensky, pero tiene un cuarto de siglo de recorrido militar.

Incorporado en 1997 a las fuerzas armadas, Zaluzhny se graduó en 2007 en la Academia Nacional de Defensa y en 2014 combatió contra fuerzas separatistas pro-rusas que recortaron enclaves en el área de Donbas, la misma que antes de la ofensiva bélica en curso la Duma, el Parlamento ruso, había declarado formalmente ser parte de la Federación Rusa y había “exigido” a Putin que la defienda.

Un militar ucraniano sostiene un lanzador de granadas propulsadas por cohetes (RPG) en posiciones de combate a las afueras de la ciudad de Járkov, Ucrania. 24 de febrero de 2022. REUTERS/Maksim Levin

Un militar ucraniano sostiene un lanzador de granadas propulsadas por cohetes (RPG) en posiciones de combate a las afueras de la ciudad de Járkov, Ucrania. 24 de febrero de 2022. REUTERS/Maksim Levin

Según un perfil de Zaluzhny publicado por la revista inglesa The Economist, las fuerzas ucranianas fueron seriamente dañadas en aquellos combates, pero los oficiales sobrevivientes curtieron entonces su determinación guerrera.

Post-soviético

Zaluznhy es parte de la primera generación de oficiales formados después de la disolución de la Unión Soviética y la independencia de Ucrania, en 1991, y tiene una fortísima posición a favor de la integración de las fuerzas ucranianas en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), la alianza militar y de seguridad creada y liderada por EEUU durante la guerra fría, enfrentada entonces al Pacto de Varsovia (la alianza militar liderada por la ex Unión Soviética) y cuya expansión hasta las mismas narices de Rusia, al cabo de la caída del Muro de Berlín y la implosión soviética, Putin invoca como causa de sus decisiones militares, que presenta como defensivas.

Hasta hace 30 años, las fuerzas ucranianas estaban completamente integradas con las fuerzas armadas soviéticas y recibían entrenamiento, principalmente, de oficiales rusos. Zaluzhny se integró así a una fuerza que estaba la etapa inicial de un proceso de des-rusificación y en los últimos años fue un proponente de la modernización de las fuerzas ucranianas a través de una creciente inter-operatividad con las fuerzas de la OTAN, aunque la estructura de comando sigue teniendo un perfil soviético.

Zaluzhny ha estado entrenando las fuerzas a su mando en el uso de las más modernas armas hechas en occidente, desde drones hasta misiles anti-tanque y ha aprobado frecuenes ejercicios conjuntos con las fuerzas armadas británicas y norteamericanas.

Mark Milley, jefe de Estado Mayor de las fuerzas norteamericanas, con quien Zaluzhny ha estado en permanente contacto
REUTERS/Joshua Roberts

Mark Milley, jefe de Estado Mayor de las fuerzas norteamericanas, con quien Zaluzhny ha estado en permanente contacto REUTERS/Joshua Roberts

De hecho, según reporta The Economist, el lunes, tres días antes del inicio de la invasión de las fuerzas rusas, discutió la situación con su contraparte norteamericana, el general Mark Milley, el jefe de Estado Mayor de las fuerzas armadas norteamericanas, según un reporte de CBS, horas después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, al cabo de una reunión con su equipo de Seguridad, había “reconocido” la independencia de dos provincias orientales de Ucrania, en el Donbas. Milley y Zaluzhny, indicó CBS, mantuvieron contactos frecuentes desde que las tropas y el equipo bélico ruso comenzaron a acercarse y a rodear territorio ucraniano.

A Zaluzhny le toca ahora hacer honor a sus palabras. Sus posiciones favorables a la OTAN y su compromiso con el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, lo vuelven un objetivo muy importante para las fuerzas rusas.