Buscan determinar los motivos de la "implosión catastrófica" del sumergible Titán en el Atlántico

Buscan determinar los motivos de la "implosión catastrófica" del sumergible Titán en el Atlántico

Los investigadores trataban de determinar este viernes los motivos de la "implosión catastrófica" del sumergible Titán que se dirigía a explorar los restos del transatlántico Titanic en el Océano Atlántico Norte, mientras familiares de los tripulantes fallecidos les rendían homenajes en sus países de origen.

El contralmirante John Mauger, de la Guardia Costera estadounidense, aseguró en una conferencia de prensa ayer que "los restos son compatibles con una implosión catastrófica" del sumergible.

Una implosión submarina es el colapso repentino hacia adentro de una embarcación, que en este caso pudo haber estado bajo una gran presión en la profundidad del océano.

Para Stefan Williams, experto en robótica submarina de la universidad de Sidney, la presión a esas profundidades es "implacable", ya que "por cada 10 metros que se baja en el mar se incrementa la presión en una atmósfera".

Eso significa que a la profundidad del Titanic -unos 3.800 metros bajo el nivel del mar- la presión es 380 veces superior a la de la superficie de la Tierra.

Todavía los investigadores no lograron detectar el motivo exacto por el que la nave pudo haber implosionado, causas que investigarán a partir de los cinco fragmentos del Titán encontrados, que incluyen "la cubierta trasera del sumergible" y un cono de la parte delantera de la nave.

El sumergible, operado por OceanGate Expeditions, había comenzado su descenso el domingo por la mañana y perdió contacto con la superficie menos de dos horas después, según las autoridades estadounidenses.

Desde entonces, comenzó una búsqueda contrarreloj para encontrar al Titán, que contaba con reservas de oxígeno para un máximo de 96 horas para los cinco tripulantes.

Ese mismo domingo, la Marina de Estados Unidos detectó un sonido que era "consistente" con una implosión, pero se determinó que "no era definitivo", por lo que continuó la búsqueda.

En tanto, el martes el sonar que operaba en el lugar detectó ruidos de golpes bajo el agua en intervalos de 30 minutos que esperanzaron a los rescatistas, pero las búsquedas dieron "resultados negativos".

En la jornada de ayer, un vehículo teledirigido llegó al fondo del mar por primera vez en la búsqueda y halló un "campo de escombros", que luego se confirmó que era la parte exterior del submarino desaparecido, según la Guardia Costera estadounidense,

"Acá no hay una caja negra, por lo que no se podrán rastrear los últimos movimientos de la nave en sí, pero reunirán tantas partes como puedan y a partir de ellas deberían poder analizar la ruptura estructural, cualquier fractura que haya ocurrido y tal vez reconstruir lo que realmente sucedió en esos últimos momentos", explicó a la BBC Ryan Ramsey, excapitán de submarinos de la Marina Real británica.

En tanto, familiares y amigos de los cinco